El centro de manejo de residuos propiedad de Tecnología Ambiental Especializada posee un negro historial de accidentes que ha dejado graves daños ambientales.
Un historial plagado de daños ecológicos es el que posee el Cimari de Ramos Arizpe, el basurero tóxico de la empresa Tecnología Ambiental Especializada.
Este 27 de marzo tuvo el quinto gran incendio de su historia, el cual tardó más de 7 horas en ser extinguido y el cual dejó graves daños ambientales.
A este siniestro se suman los incendios ocurridos en 2007, 2015, 2017 y 2018, todos ellos de gran intensidad y fuentes de alta contaminación.
Además de lo anterior, el Cimari de Ramos Arizpe ha sido escenario de derrames químicos y otros incidentes de gravedad que han dejado un rastro de contaminación, destrucción y riesgos a la salud de los coahuilenses.
A pesar de que varios ambientalistas han alzado la voz en contra de este basurero tóxico, la empresa de Enrique Osuna Westrup sigue operando en completa impunidad, contaminando y dañando la vida de miles de personas y acabando con el medio ambiente de Ramos Arizpe.