Juan Manuel Quijada, titular de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama), reconoció que aún queda mucho por hacer para llegar a las comunidades más vulnerables y grupos prioritarios en todo el país.
Sin embargo, se informó que más de 140,000 profesionales de la salud han sido capacitados en la atención y diagnóstico de trastornos como la depresión, ansiedad y adicciones.
Se resaltó la reconversión de unidades médicas y centros de atención en 341 centros comunitarios de salud mental y adicciones, así como la creación de áreas específicas en 95 hospitales generales para atender problemas mentales y adicciones.
A pesar de los avances, Quijada admitió que se necesita continuar trabajando para ampliar el alcance de los servicios de salud mental y reducir las brechas en la atención, especialmente a raíz de la pandemia de COVID-19, que visibilizó las afectaciones emocionales en la población.